Nos llega la primera crónica de la peregrinación de nuestros hermanos del Corpus Christi y de San Francisco de Asís. Hoy es una jornada de autocar que les dejará mañana día 28 sobre las once en la ciudad de Praga (Rep Checa) Mientras os escribo estas letras y durante toda esta noche, siguen su periplo sin más paradas que las obligadas para la sustitución del chofer.
Esta es la crónica y las fotografías (nos han prometido a partir de hoy muchas más) del primer día:
Queridos hermanos, empezamos la peregrinación con la penitencial del pasado martes en la parroquia del Corpus Christi de Alicante manifestando todos nuestros pecados, bueno, confesando las culpas que hasta ahora nos ha concedido Dios poder ver. El Señor nos invitaba a crecer, a estar alegres para poder realizar la misión que nos tiene preparada en nuestra vida y con esta esperanza llegamos a la madrugada de hoy, el día de la partida hacia Cracovia. La falta de sueño, los imprevistos, los nervios de los últimos preparativos, parecían quitarnos la paz en este momento, pero el Señor nos estaba esperando frente a los juzgados de Alicante y eso nos movía a llegar puntuales, a ponernos en disposición, a experimentar en la organización de la salida la comunión de los santos viendo también a hermanos que venían a despedirnos sin tener a ningún familiar subido en el autocar contentísimos de acompañarnos en ese momento tan especial.
Una vez puestos en marcha y tras la oración Carlos Esparza, uno de nuestros presbíteros que junto a Enrique Vicedo nos acompañan en este viaje, pudimos entrar en el descanso,
Nos espera Cracovia, el Papa, Kiko… en definitiva, nos espera una palabra que ilumine nuestra misión. Tras almorzar y comer en diferentes áreas de servicio y experimentar en ellas de nuevo la comunión, hemos disfrutado de la película «Resucitó» en la que me ha llamado la atención cómo un tribuno romano se convertía al cristianismo no sin antes resistirse con todas sus fuerzas. El Señor le da su espíritu y eso hace que salga a anunciar el Evangelio como un discípulo más. ¿Cuántas veces me lo he pensado antes de hacer yo lo mismo? Gracias a Dios, el Señor es rico en misericordia, tiene paciencia y por eso estamos alegres.
Por la tarde, sobre las 19, y en el contexto del rezo de vísperas, se nos ha invitado a ser luz de las naciones y a llevar la buena nueva a todos los que nos encontremos. Ha presidido E.Vicedo, el cual nos ha invitado a reflexionar sobre el capítulo 1 de la primera epístola de San Juan que trata sobre el misterio de nuestra salvación y nos decía textualmente «Dios tiene una palabra para ti que te da Vida. No te la da ni la inteligencia ni la salud ni el dinero. Dios quiere poner Luz en tu vida, que seas Luz para los demás. Reconoce de verdad que eres débil y pecador pero no te asustes ni escandalices, porque Cristo es Luz y quiere iluminar lo que eres de verdad para que puedas descansar, para que dejes que tu vida la lleve el Señor. Y Dios te sacará de las tinieblas en que te encuentras» Tras cantarle a María hemos terminado las vísperas en un ambiente de gran alegría que se ha manifestado posteriormente en canciones espontáneas entre los jóvenes, con letras improvisadas y divertidas donde con cariño, podemos decir que no dejaban títere con cabeza.
Ya nos quedan quince horas menos para llegar a Cracovia. Rezad por nosotros.