Hace casi un año un grupo de jóvenes de nuestra parroquia contactó con nosotros para pedirnos ayuda: querían montar un musical. El musical Godspell (Palabra de Dios). En principio, la idea surgió como mera diversión, luego pasó por la fase de ser un medio para ayudar a los jóvenes a recaudar dinero para la JMJ de Río 2013 y ahora, tras la convivencia que tuvimos en los Salesianos del Campello los días 11 y 12 de abril, vimos que Jesucristo nos está llamando a través del Godspell. El objetivo no es otro que cumplir la llamada de Benedicto XVI:
«También a vosotros os incumbe la extraordinaria tarea de ser discípulos y misioneros de Cristo en otras tierras y países donde hay multitud de jóvenes que aspiran a cosas más grandes y, vislumbrando en sus corazones la posibilidad de valores más auténticos, no se dejan seducir por las falsas promesas de un estilo de vida sin Dios.
»De esta amistad con Jesús nacerá también el impulso que lleva a dar testimonio de la fe en los más diversos ambientes, incluso allí donde hay rechazo o indiferencia. No se puede encontrar a Cristo y no darlo a conocer a los demás. “Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación” (Mc 16,15)».
En definitiva, el fin de este musical no es otro que llevar el Evangelio de nuestro Señor allí donde vayamos a representarlo, animar a otros jóvenes a encontrarse con Jesús, dar testimonio de que Jesucristo vive HOY en el corazón de cada hombre y mujer de la tierra, que hay esperanza para nuestras vidas, que el sufrimiento tiene un sentido, que los jóvenes cristianos están vivos de verdad y que tienen mucho que decir. En definitiva, que los jóvenes de la parroquia Corpus Christi de Alicante han tenido experiencia de Dios en su vida y quieren transmitírsela a otros.
La idea inicial de recaudar dinero para Río 2013 la dejamos en manos de Dios. Estamos seguros de que, como siempre, nos precederá y nos dará aquello que necesitemos en cada momento.
Realmente, Jesucristo pasó por nuestras vidas durante esos dos días de convivencia. Este es un breve relato de lo que vivimos.
Primera sorpresa: el grupo de animación creímos que vendrían pocos jóvenes a la convivencia, pero vinieron muchos, unos treinta. Comenzamos rezando laudes, la única manera de obtener verdadera fuerza para
Sin embargo, tras los laudes y una breve charla sobre lo que debía ser Godspell, la nueva visión de nuestro objetivo, de la actitud a la que Dios nos llamaba, TODO CAMBIÓ. Entre todos, vimos que nuestra misión era honrar a Dios con nuestras vidas, en casa, en el trabajo, estudiando, en la música, en nuestra relación con los demás, etc. Y que aquel momento, durante la convivencia, honrar a Dios era participar, confiar, obedecer y trabajar.
llevar a cabo nuestro plan: ensayar y bailar todo el primer acto (8 escenas y 9 bailes). Los jóvenes nos miraban incrédulos ante tal reto, se notaba en sus miradas que no confiaban en que lograríamos ese objetivo.
A partir de ese momento, durante los dos días, Jesucristo apareció con fuerza, con esa fuerza a la que nos tiene acostumbrados cuando confiamos en Él. Desde que nos subimos al escenario fue un continuo gozo ver cómo cada joven participaba, ensayaba, bailaba, interpretaba su papel con ganas, con esa alegría que solo los jóvenes tienen y que tanta envidia nos da a algunos mayores. Cada joven ayudaba en el cometido que se le asignaba, obedecía sin resistencia. Fue una verdadera lección de humildad para el grupo de animación a los que tanto nos cuesta obedecer. Escuchamos que «nuestra actitud es el perfume de nuestro corazón». Si nuestra actitud huele mal, nuestro corazón huele mal. Si nuestra actitud es buena y positiva, nuestro corazón huele a rosas. En ellos se instaló una actitud diferente, una actitud positiva y de confianza en Jesucristo. Todo iba sobre ruedas: los bailes salían a la primera, las escenas iban tomando forma, la coordinación iba viento en popa. El grupo nos mirábamos atónitos ante tantas ganas de trabajar. No hubo un solo reproche ante el intenso trabajo al que los sometimos. Al final del primer día nos visitó Pedro Baidez y pudimos ofrecerle el fruto de nuestro trabajo. Creemos que le gustó mucho. Nos dio una palabra de ánimo y, con la alegría del trabajo realizado, nos fuimos a dormir.
El día siguiente fue mejor, si cabe. Rezamos laudes y nos pusimos a trabajar. Todos los jóvenes seguían activos, alegres, positivos, dispuestos, implicados… «olían a rosas». Aunque parezca increíble, al final del día pudimos completar el objetivo al que estábamos llamados: completamos los ensayos y bailes del primer acto. ¡¡¡Un verdadero milagro para todos!!!
Como en toda convivencia, terminamos con una rueda de experiencias donde todos expresamos nuestras opiniones y sentimientos. El sentir general fue: «No creía que esto fuera a funcionar y ahora sí creo» – «Yo venía con pocas ganas y me lo he pasado fenomenal» – «Ha estado genial» – «No tenía confianza en que fuera a salir todo como ha salido» – «Me lo he pasado fenomenal» – «Dios ha pasado por aquí» – «Ahora creo que podemos representarlo».
Verdaderamente, Dios estuvo presente esos dos días. La parroquia Corpus Christi tiene unos jóvenes excepcionales, increíbles, llenos de alegría y lo que es más importante: tienen a Jesucristo en sus corazones y desprenden un perfume precioso.
A los jóvenes de Godspell: Gracias por la enorme lección de actitud que nos habéis dado al equipo de animación.
NOS VEMOS EL 1 DE MAYO EN SALESIANOS. NOS ESPERA EL SEGUNDO ACTO.
José Raimundo
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José Raimundo Fernández y Juan Castaño son los responsables de ayudar a los jóvenes de nuestra parroquia a desarrollar actividades orientadas a la JMJ 2013.
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Parroquia del Corpus Christi - Alicante 